Las lluvias de octubre se concentraron principalmente en el sudeste provincial, donde los acumulados superaron los valores históricos y mantuvieron elevada la humedad en los perfiles del suelo.
En contraste, el norte y oeste de Córdoba presentaron precipitaciones deficitarias, generando condiciones de sequedad superficial, por lo que podrían observarse síntomas de estrés hídrico en los maíces sembrados de manera temprana.