Hacia finales de julio, la cosecha de maíz alcanzaría el 79 % de las hectáreas cosechables y continúa con un retraso en las labores respecto de la campaña pasada, con una variación negativa del 19 %.

Se realizó una nueva actualización de la superficie sembrada calculada por imágenes satelitales (Departamento de Información Agronómica – BCCBA). Se estima un rendimiento promedio de 45,4 qq/ha, resultando una diferencia negativa del 13 % en comparación con el promedio histórico de la provincia. La producción total se estima en 953.300 toneladas, teniendo en cuenta cultivares en secano y bajo riego, una de las producciones más bajas registradas por la Bolsa de Cereales de Córdoba (desde la campaña 2017/18). Estos resultados se explicarían principalmente por un 40 % de hectáreas perdidas y una gran variabilidad de rendimientos registrados a cosecha.

Con un 74 % de los lotes cosechados, continúan las labores con un retraso del 22 % en comparación con la campaña 21/22. La campaña de sorgo comenzó con casi la mitad de las hectáreas sembradas en comparación con los registros históricos, y con un 65 % de las mismas destinadas a forraje. El sorgo con destino a grano se estima con un rendimiento de 29,0 qq/ha, resultando en una producción de 9.380 toneladas, un 20 % superior a lo producido en la campaña pasada.

Las precipitaciones en el mes de julio estuvieron por encima del promedio histórico en todos los departamentos de la provincia, dificultando el secado de los granos para llegar a los valores óptimos de humedad para la trilla, resultando en un retraso en las labores de la misma.

De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional, para los próximos días se esperan precipitaciones de entre 5 a 10 milímetros en la zona noreste de la provincia. Además, la temperatura media rondaría los 10  a 16 °C.